El cuidado de las uñas puede parecer cosa de mujeres, con miles de esmaltes de colores y productos especiales. Pero la realidad es que su salud es cosa de todos. Atento a los siguientes consejos.
El cuidado de las uñas no responde solo a una cuestión estética. Formadas en su mayor parte por queratina, son responsables de la protección de los tejidos de los dedos frente a los agentes externos. Pero su papel va más allá. Igual que la piel o el pelo, pueden delatar problemas de salud, falta de hidratación (sigue leyendo aquí para conocer la importancia de una buena hidratación) o una alimentación incorrecta.
Los cuidados para mantener unas uñas sanas empiezan en casa y son una obligación de todos
Son muchos los factores que las ponen en peligro, empezando por la edad, las lesiones, algunos medicamentos o los hongos. Por eso, para que estén cuidadas, no basta con un simple proceso de manicura y pedicura. ¿Cómo detectar si mis uñas no están sanas? Cuando el color es uniforme y presentan una textura lisa, está todo bajo control. El problema aparece cuando las uñas están decoloradas, tienen dificultades para desarrollarse con normalidad o se encarnan con frecuencia.
Pautas a seguir para mantener unas uñas sanas
- Los cuidados comienzan en casa. Las uñas deben estar siempre limpias y bien hidratadas. Aunque solamos dejarlas en manos de especialistas para mantener su buena apariencia, debemos incorporar el tratamiento de las uñas a nuestra rutina diaria. Lo mejor es controlar su tamaño y las irregularidades con una lima. Cuando necesitemos unas tijeras, deben ser especiales y debemos guiarnos por la forma de la cutícula para cortarlas.
- Protección frente a todas las agresiones. Las uñas son la barrera de contención de los tejidos de los dedos, es decir, reciben todos los ataques. Por eso, debemos poner de nuestra parte para que su impacto sea el menor posible. Utiliza siempre guantes cuando vayas a realizar tareas que tengan un efecto directo sobre las manos, por ejemplo, para fregar los platos, para labores de jardinería, etc.
- Cuanto más tiempo al natural, mejor. Esta es una recomendación especial para las mujeres. Aunque las lacas de uñas contribuyen a mejorar su aspecto, no es saludable llevarlas siempre pintadas. Es necesario dejarlas durante ciertos periodos de tiempo al natural, para que respiren. Cuando tengas que quitarle las capas de esmalte, mejor utilizar productos para uñas sin acetona. Son menos agresivos y no resecan tanto la queratina.
- Atención a la alimentación y a los hábitos. Las deficiencias en la dieta dejan su huella en la salud de las uñas. Lo mismo ocurre con otros hábitos como el tabaquismo o la tendencia a morderlas. No hay posibilidad de error. Las uñas siempre dicen la verdad.
- No te olvides de los pies. Las uñas de nuestras extremidades inferiores son las grandes olvidadas, aunque necesitan los mismos cuidados. Entre las recomendaciones más comunes destacamos: llevar chanclas en lugares públicos como las piscinas y utilizar calzado con la talla correcta.
¿Cuáles son tus trucos para mantener unas uñas sanas y bonitas?